Publicado por James Nolan el 5 de marzo 2019 para VICE Reino Unido.
Es la noche de un sábado en un club del norte de Londres y Mo, un joven de 26 años, se traga una pastillita rosa con un trago de Red Bull. En una hora, está bailando sin control. Aunque la euforia que siente es parecida a la que le provoca éxtasis, las luces del techo que están encima del DJ y que van y vienen como si estuvieran reflejadas en el agua, indican que no ha consumido MDMA, sino 2C-B, una droga alucinógena disponible en la red oscura que ha encontrado su nicho de mercado en los clubes de Reino Unido. “Es la droga que más se ve en las fiestas, después de la MDMA, la cocaína y la ketamina, pero es normal encontrarse con gente que nunca ha oído hablar de ella”, explica Mo cuando hablo con él unos días más tarde.Durante décadas, solo los expertos en drogas psicodélicas conocían la 2C-B, pero ya lleva unos años siendo más popular, lo que ha hecho que cada vez haya más traficantes vendiéndola en la red oscura.

Fuente original en inglés: VICE Reino Unido
Fuente original en español: VICE España