SETAS PSICOACTIVAS

INTRODUCCIÓN

Las setas que contienen psilocibina, un alcaloide capaz de alterar el sistema nervioso central, han sido utilizadas durante milenios por culturas indígenas de América en rituales espirituales y terapéuticos. Existen evidencias arqueológicas que demuestran su uso como fármacos sacramentales desde hace más de tres mil años.

En el siglo XX, especialmente en las décadas de 1950 y 1960, despertaron el interés de la ciencia occidental por su potencial psicodélico y terapéutico, siendo Albert Hofmann quien logró aislar y sintetizar químicamente estos compuestos. Actualmente, aunque su consumo entre jóvenes es menos frecuente que el de cannabis o alcohol, ha crecido en contextos de exploración personalfestivales y prácticas como la microdosificación.

Investigaciones recientes exploran su uso controlado en el tratamiento de depresión, ansiedad y adicciones, pero esto no implica que su consumo recreativo sea seguro, ya que puede conllevar riesgos psicológicos y legales importantes.

COMPOSICIÓN Y PRESENTACIÓN

La psilocibina y su metabolito activo, la psilocina, son los principales compuestos psicoactivos presentes en ciertas especies de setas psicoactivas.

Estas sustancias provocan experiencias similares al LSD, conocidas como viajes psicodélicos, que afectan la percepción, el pensamiento y las emociones.

Las setas pueden consumirse frescas o secas, aunque también existen en formato de polvo, cápsulas o infusiones. La potencia varía considerablemente según la especie, el método de cultivo y las condiciones de conservación, siendo las setas secas más concentradas en psilocibina que las frescas. Esta variabilidad hace que el efecto sea difícil de predecir, lo que aumenta el riesgo de reacciones adversas, especialmente en contextos no controlados.

VÍAS DE ADMINISTRACIÓN

Las setas con psilocibina se ingieren por vía oral, preferentemente en ayunas, lo que intensifica sus efectos. Se pueden consumir masticadasmezcladas con comida o bebida, o preparadas en infusión para suavizar su sabor.

Las dosis varían: entre 1 y 3 gramos se considera una dosis baja o media, mientras que entre 5 y 7 gramos se clasifica como alta, con efectos mucho más intensos.

EFECTOS DESEADOS Y RIESGOS

Al ser una sustancia que se administra por vía oral, es decir, comida, los efectos suelen comenzar entre los 25 y 40 minutos después de la ingestión y pueden durar hasta seis horas, dependiendo de la dosis, la especie de seta y el estado físico y emocional de la persona.

Durante este periodo, pueden aparecer efectos físicos como dilatación de pupilas, bajada de la tensión arterial, sensación de amodorramiento, náuseas, debilidad, escalofríos, dolor de cabeza, boca seca, sudoración y aumento de la temperatura corporal.

En el nivel psicológico, se producen alteraciones sensoriales, sensaciones de separación del cuerpo, procesos de introspección profunda, cambios en la percepción del entorno y episodios de desorientación.

Uno de los principales riesgos es calcular mal la dosis, ya que la potencia de las setas varía según la especie, el cultivo y la conservación. Además, el estómago vacío puede intensificar los efectos, lo que aumenta la posibilidad de vivir experiencias abrumadoras o desagradables si no se consume con precaución y en un entorno seguro.

Es frecuente que en un mismo “viaje” se combinen momentos agradables con momentos angustiosos.

También existe peligro de consumo de setas venenosas por equivocación.

REDUCCIÓN DE RIESGOS

Aunque las setas con psilocibina pueden generar experiencias intensas y significativas, es fundamental tomar precauciones para minimizar los riesgos físicos y psicológicos. Aquí te compartimos algunas recomendaciones clave:

  1. Identificación segura: Consume únicamente si estás 100 % seguro de que se trata de una especie psilocibina y no de hongos tóxicos. La confusión puede tener consecuencias graves.
  2. Dosis baja la primera vez: Si las setas están secas, una dosis de entre 1 y 1,5 gramos es una cantidad orientativa para principiantes. Es mejor empezar con menos y observar cómo responde el cuerpo.
  3. Set & setting: Asegúrate de estar en un buen estado mental y en un entorno seguro, acompañado por personas de confianza. Esto influye directamente en la calidad y seguridad de la experiencia.
  4. Evitar mezclas: No combines psilocibina con alcoholestimulantes o inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO), ya que pueden potenciar o alterar los efectos de forma impredecible.
  5. Espacio tranquilo: Ten preparado un lugar cómodo y silencioso donde puedas descansar o aislarte si el viaje se vuelve demasiado intenso.
  6. No conducir ni realizar tareas peligrosas: Evita cualquier actividad que requiera coordinación o atención plena durante varias horas después del consumo.
  7. Hidratación y alimentación ligera: Mantente hidratado y evita comidas pesadas antes del consumo. Un estómago vacío puede intensificar los efectos, pero también puede aumentar el malestar físico.
  8. Apoyo emocional disponible: Si es posible, contar con alguien con experiencia que pueda acompañarte o ayudarte en caso de ansiedad o desorientación puede marcar una gran diferencia.
  9. Evitar el consumo frecuente: El uso repetido puede generar tolerancia y reducir la capacidad de integrar las experiencias. Es recomendable dejar tiempo entre sesiones para procesar lo vivido.