La hembra excava en la piel, pone huevos y provoca:
Irritación
Erupciones
Picor intenso, sobre todo por la noche
Puede afectar manos y pies, especialmente entre los dedos, muñecas y axilas, pero también puede salir en codos, pecho, genitales, ombligo y nalgas.
Se ven ampollas y pústulas (pequeñas ampollas con pus) y a veces pueden infectarse si te rascas mucho.
La sarna se transmite por contacto largo y directo de piel con piel.
Abrazos o apretones rápidos no contagian.
También puede pasar por compartir ropa, sábanas o toallas (los ácaros viven 3-4 días fuera del cuerpo).
La sarna de animales no se contagia a humanos, solo puede causar una reacción leve.
El diagnóstico de la sarna lo hace el personal médico buscando lesiones típicas en la piel.
Puede confirmarse viendo ácaros, huevos o restos en una muestra de piel al microscopio.
También se descartan otras enfermedades de la piel con síntomas parecidos.
El tratamiento suele ser una crema o loción que se aplica en la piel.
También deben usarla las personas que viven contigo y tus parejas sexuales.
Y no olvides lavar bien la ropa y la ropa de cama para eliminar los ácaros.
Las personas que hayan tenido contacto directo con la piel, la ropa o la cama de alguien con sarna deben consultar con personal médico.
Se valorará si es necesario aplicar tratamiento preventivo, aunque no haya síntomas.
Si tienes dudas o quieres saber más sobre las infecciones de transmisión sexual (ITS), puedes consultar con profesionales de la salud, acude a:
Centro de salud más cerano.
Servicio de salud de tu universidad.
Farmacia de confianza.
Allí pueden orientarte, resolver tus preguntas y ayudarte a acceder a pruebas o tratamiento si es necesario. ¡No te quedes con la duda! Infórmate y cuídate.